El misionero Lisandro Piñero realizó una definición exquisita para convertir uno de los goles del encuentro entre la Quinta División de Banfield y su par Atlético Tucumán, que terminó en empate por 2 a 2.
Licha tuvo en sus pies el empate del partido que se disputó en cancha del Taladro, desde los 12 pasos.
Transcurrían los últimos 3 minutos del partido cuando Banfield tuvo un penal a favor que, con personalidad, Piñero tomó para empatar contra el Decano. Lejos de sentirse nervioso, ejecutó una definición espectacular:
Trote corto, repiqueteo y una sutil caricia con su derecha para picar la pelota al medio de la red y engañar por completo al arquero, que se había jugado a uno de sus palos.
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